Un hombre peligroso

Hola,

Un día como hoy, el 1 de febrero de 1931, el anarquista italiano Severino Di Giovanni fue fusilado en Buenos Aires. Fue maestro, periodista, obrero tipógrafo, poeta…, y tuvo que huir de la Italia fascista de Mussolini. Desde su llegada a la Argentina mantuvo una intensa actividad militante, pero no se quedó en la elaboración y difusión de la teoría anarquista: abrazó con determinación la acción directa violenta realizando diversos ataques contra bancos o instituciones, en los que murieron varias personas. Su activismo individual fue polémico y discutido incluso dentro del propio movimiento anarquista.

Fue detenido, torturado y juzgado sumariamente por el régimen de Uriburu. Pese a que la pena de muerte no estaba vigente en la Argentina en ese momento, fue ejecutado al día siguiente. El abogado militar que lo defendió fue cesado en el ejército, encarcelado, desterrado y finalmente envenenado en una cena de «camaradería».

Esto escribió pocas antes de morir fusilado: «(…) No busqué afirmación social, ni una vida acomodada, ni tampoco una vida tranquila. Para mí elegí la lucha. Vivir en monotonía las horas mohosas de lo adocenado, de los resignados, de los acomodados, de las conveniencias, no es vivir, es solamente vegetar y transportar en forma ambulante una masa de carne y de huesos. A la vida es necesario brindarle la elevación exquisita, la rebelión del brazo y de la mente. Enfrenté a la sociedad con sus mismas armas, sin inclinar la cabeza, por eso me consideran, y soy, un hombre peligroso».

Vivió una apasionada historia de amor con la anarquista Josefina América Scarfó, que permanece en las cartas que se enviaron mutuamente, y que fueron confiscadas por las autoridades.

En 2017 publicamos nuestro libro L.O.R.C.A., en el que se contextualiza y se apoya la obra poética, narrativa y dramática de Federico García Lorca desde diversos puntos de vista: la perspectiva de género, la memoria histórica y la identidad política, con ilustraciones de Juan Carlos Mestre, textos de Isabel Cadenas Cañón, Juan Carlos Monedero y Emilio Silva, y fotografías de Clemente Bernad.

Federico García Lorca no robó, ni ejerció la violencia ni mató a nadie. Pero fue asesinado por los golpistas hacia las 4:45 de la madrugada del 18 de agosto de 1936, en el camino que va de Víznar a Alfacar. Su cuerpo sigue desaparecido.

Para el fascismo era un hombre peligroso.

Lamentablemente el libro está agotado. Ojalá algún día podamos hacer un reedición del mismo. Ojalá con motivo de la aparición de sus restos.

Salud.

PD. El periodista Roberto Alt presenció el asesinato de Severino Di Giovanni y escribió un artículo memorable. Como viera que algunos testigos reían y estuviera presente un señor con frac y zapatos de baile, terminó así su artículo: «Pienso que a la entrada de la Penitenciaría debería ponerse un cartel que rezara: — Está prohibido reírse. — Está prohibido concurrir con zapatos de baile».

PD2. Hay fotografías del fusilamiento de Severino Di Giovanni. Incluso en 2020 aparecieron algunas fotografías inéditas en el Archivo General de la Nación (AGN).

PD3. No hay fotografías del asesinato de Federico García Lorca.

PD4. En 1999 un funcionario devolvió las cartas secuestradas a Josefina América Scarfó. «He venido a rescatar algo mío», dijo ella para justificar su presencia en la Casa de Gobierno.