L.O.R.C.A.

Hola,

Un día como hoy, el 18 de agosto de 1936, aproximadamente a las 4:45 de la madrugada, fue asesinado Federico García Lorca en algún lugar del camino entre Víznar y Alfacar, en Granada. Junto con él fueron asesinados aquella noche el maestro Dióscoro Galindo y los banderilleros anarquistas Francisco Galadí y Joaquín Arcollas.

Sus cuerpos permanecen desaparecidos.

En enero de 2017 la obra de Federico García Lorca pasó al dominio público, 80 años después de su muerte, a pesar de que el cuerpo aún no hubiera aparecido.

Para nosotrxs fue una magnífica noticia, más que nada porque se nos abrió la oportunidad de publicar un libro con la obra del poeta sin tener que pasar por las horcas caudinas de abonar los derechos de autor a una familia cuyo comportamiento ha dejado mucho que desear no solo en ese aspecto (inolvidable su negociación con el régimen franquista para publicar sus obras completas en Aguilar en 1954), sino fundamentalmente por su oposición frontal a buscar el cuerpo del poeta, con argumentos tan delirantes y fuera de lo razonable que invitan a pensar que en algún momento se buscó alguna solución personal y secreta para trasladar sus restos a algún lugar desconocido (salvo para ellxs, claro).

Así que nos lanzamos a una arriesgada aventura con varixs amigxs: construir un libro en el que una cuidadosa selección de textos de Federico García Lorca se acompañara por imágenes y reflexiones sobre el poeta desde la política, la memoria histórica y el feminismo, de la mano de Juan Carlos Mestre, Emilio Silva, Isabel Cadenas Cañón, Juan Carlos Monedero y Clemente Bernad.

En primer lugar, Juan Carlos Mestre realizó una serie de ilustraciones específicas para cada obra de Federico García Lorca. Además, un texto de Isabel Cadenas Cañón sitúa la obra del poeta bajo un ángulo de análisis feminista y de orientación sexual. Juan Carlos Monedero construye una biografía política y Emilio Silva lo hace desde la memoria histórica, fundamentalmente en lo relativo a su asesinato y a la desaparición de sus restos. Finalmente Clemente Bernad apoya visualmente los diversos textos con fotografías de los lugares donde Federico García Lorca pasó sus últimas horas de vida.

El libro no es un ensayo sobre el poeta, ni un análisis académico sobre las claves de su obra ni nada parecido, sino que pretende celebrar el espíritu de su vida y de su obra a través de un formato experimental, lúdico, sorprendente y ambiguo.

El título obedece a la íntima voluntad de considerar al poeta portador de un activismo revolucionario secreto e incógnito. Las letras de su apellido pueden ser siglas infinitas de todo aquello que las personas que saben apreciar su poesía, su trascendencia y su antifascismo puedan imaginar.

L.O.R.C.A.: su significado también es tuyo.

El libro se agotó muy rápidamente, así que por el momento no hay manera humana de que puedas conseguir un ejemplar. Si no lo tienes, no te queda más remedio que lamentarlo, pedirle a algunx amigx que te lo deje, o acudir a las bibliotecas de Navarra (el Depósito Legal es de Navarra) o a la Biblioteca Nacional. Realmente es un libro precioso que merece la pena paladear.

Igual algún día se alinean las estrellas para que podamos hacer una reedición. Ojalá podamos hacerla corregida y aumentada porque hayan aparecido los restos de Federico, y los de Dióscoro, Francisco y Joaquín…, y los de tantxs otrxs…

Seguimos.

Salud.

PD. Tras llegar el exdiputado de la CEDA Ramón Ruiz Alonso con un grupo de fascistas a las 13:30 del día 16 de agosto para detener a Federico García Lorca en casa de los Rosales en la calle Angulo de Granada, lo trasladaron en un coche Oakland por la calle Tablas, plaza de la Trinidad y calle Duquesa hasta el Gobierno Civil. Allí fue confinado en una habitación cuyas ventanas daban al Jardín Botánico. A día de hoy, ese edificio alberga la Facultad de Derecho de la Universidad de Granada, y la habitación donde el poeta estuvo recluido antes de ser trasladado a Víznar para ser asesinado es actualmente el departamento de Derecho Constitucional. Sí, de la Constitución de 1978. De esa. Y no, no hay ningún cartel o señalización que diga nada al respecto, por si había alguna duda.