METEORITO

Hola,

Un día como hoy, el 30 de noviembre de 1954, el meteorito Sylacauga cayó a las 2:46 pm (18:46 UTC) en el pueblo de Sylacauga, Alabama. A menudo es denominado Meteorito Hodges, porque uno de sus fragmentos, del tamaño de un pomelo y un peso de 3,86 kg, se desprendió del cuerpo principal, perforó limpiamente el techo de una casa de madera situada en Oak Grove, atravesó las sucesivas capas y estantes de un mueble de madera dura, rebotó en una radio situada en una de las habitaciones y golpeó a Ann Elizabeth Hodges, que estaba durmiendo en un sofá en ese momento. La mujer, que tenía 31 años, fue gravemente golpeada en uno de sus costados. Logró sobrevivir pero el incidente le causó graves secuelas psicológicas. El fragmento se puede contemplar en la actualidad en el Alabama Museum of Natural History.

En 2020, con motivo del 20 aniversario de su fundación, editamos junto con la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), el libro Las voces de la tierra, en el que se muestran objetos hallados en fosas comunes de personas asesinadas por los golpistas de julio de 1936, fotografiados por José Antonio Robés.

Un sonajero, medallas, botones, una pipa, monedas, suelas de goma, trozos de papel o de madera, un anillo, balas, una llave, lápices, una escudilla, un cepillo de dientes, una navaja, hebillas, horquillas para el pelo, cartuchos, mecheros, un peine, una prótesis dental, un pendiente, un reloj, dos gemelos, un crucifijo, unas botas, unas gafas, una ficha de dominó, un sacapuntas, un dado…

Como dice Emilio Silva en el prólogo del libro, «Todos estos objetos han aparecido en exhumaciones a lo largo y ancho de nuestra geografía. Concentran un enorme valor emocional para las familias, humanizan las fosas comunes, son estratos y sedimentos de las formas de vida y de las de muerte».

Cada fotografía de cada objeto se acompaña en el libro por un texto, para lo que tuvimos el honor de contar con la participación de Sukina Aali-Taleb, Rosa María Artal, Santiago Auserón, Juan Miguel Baquero, Fernando Berlín, Clemente Bernad, Juan Diego Botto, Isabel Cadenas Cañón, Conchi Cejudo, Cristina Fallarás, James D. Fernández, Francisco Ferrándiz, Catherine François, Ana Gaitero, Guille Galván, Antonio Gamoneda, Guadalupe Grande, Carlos Hernández, Antonio Maestre, Ana Messuti, Juan Carlos Mestre, Miguel Ángel Muñoz Sanjuán, Marta Nebot, Olga Novo, María Ángeles Pérez López, Edurne Portela, Raquel Ramírez de Arellano, Jorge Riechmann, Miguel Ríos, Olga Rodríguez, Isaac Rosa, Rozalén, Marta Sanz, Emilio Silva Barrera, Héctor M. Silveiro Fernández, Guillermo Spottorno, Miguel A. Varela, Willy Veleta y Enrique Villarreal «El Drogas».Todo un lujo.

Si estás interesadx en adquirir el libro, debes saber que puedes hacerlo en nuestra tienda o directamente en la página web de la ARMH, y que el importe se destina en exclusiva a la ARMH, para que pueda continuar con su trabajo, que lleva a cabo sin ningún tipo de subvención ni ayuda oficial.

Salud.

PD. Si el meteorito se hubiera estrellado contra el suelo de Palencia, Gumiel de Izán, Santalla, Quintana de Rueda, Guadalajara, Grau, Joarilla de las Matas, Faramontanos de Tábara, Concud, A Pobra do Brollón, El Espinar, Villafranca del Bierzo, Teilán, Valladolid, Val do Dubra, Boca de Huérgano, Canseco, Chaherreros, Izagre, Gradefes, Matallana de Valmadrigal o tantos otros lugares de la «piel de toro»…, muy probablemente habría dejado al descubierto precisamente esas fosas comunes en las que los golpistas de 1936 asesinaron a miles de personas y no habría hecho falta esperar más de 50 años para exhumar los restos de lxs asesinadxs y recuperar los objetos que les acompañaron en las fosas.

PD2. ¿Y si se hubiera estrellado en junio de 1936 contra el despacho del palacio de la Capitanía General de Navarra desde donde el general Emilio Mola diseñó y dirigió el golpe de Estado contra la II República? Los meteoritos están muy mal repartidos.